jueves, 26 de julio de 2007

Día 5: Monteverde-Manuel Antonio

Amanece otro día en el paraíso, y hoy nos despedimos del Monteverde con un alucinante desayuno que nos han preparado Marcelo y José a base de cafés, zumos, frutas naturales, granola (mezcla de cereales azucarados, hecha por ellos mismos), huevos revueltos, etc.
Después de hacernos las fotos de rigor con los hermanos del hotel, nos dirigimos en el coche hacia el centro de Santa Elena, para coger la carretera en dirección al Pacifico, pero no pudimos resistir la tentación de parar en un supermercado y comprar algún paquete de café de Monteverde, que tan delicioso estaba.
Empezamos a "sufrir" de nuevo la tortura de las carreteras de montaña durante otro par de horas, hasta que por fin pudimos divisar el Océano Pacifico, y allí la cosa cambia. Las carreteras ya son de asfalto, y en algún tramo son autovías.
Como buenos turistas, hicimos un alto al pasar por el puente del Rio Tárcoles, infestado de cocodrilos, a ver que tal se encuentran, eso sí a unos diez metros de altura sobre el puente, por si acaso.
Al cabo de un rato reanudamos el viaje hacia Manuel Antonio, llegando a la ciudad de Quepos, que es la última antes de la entrada del Parque, donde por cierto, se acaba la carretera y hay que dar la vuelta.
Hay dos opciones para alojarse, una es en Quepos, que es mas barato, y la otra es hacerlo en la carretera del Parque, que fue lo que hicimos, que aunque son más caros, en la época en la que fuimos, tampoco nos supuso mucho más dinero y son más bonitos.
Llegamos poco antes de mediodía, por lo que una vez dejado el equipaje en el hotel, nos fuimos en dirección al Parque, y nos dimos nuestro primer baño en el Pacifico en una playa preciosa, un poco sucia, pero muy muy bonita.
Una vez saciada el hambre de baño, hay que saciar la otra, y para llenar el estomago, existen varios sitios en la playa, pero nosotros fuimos a uno muy bonito, que se llama "EL ATARDECER".
Esta situado en una primera planta con vistas a la playa. La comida es muy buena, sobre todo el pescado, no dejéis de probar la hamburguesa de pescado (con guarnición de patatas y ensalada) y el casado de pescado, está buenísimo. El casado es como un plato combinado en el que ponen unos filetes de pescado (pargo rojo), patacones (banana frita), ensalada, frijoles negros y arroz blanco cocido con agua de coco, por poco dinero, unos 4$ por persona aproximadamente, y por supuesto unas Imperiales bien frías.
Por supuesto una vez satisfecho el estomago, ¡¡¡OTRA VEZ AL AGUA!!!.
Por la noche salimos a dar una vuelta por Quepos, y la verdad es que no nos gustó mucho, por lo que nos fuimos a tomar algo en dirección al Parque, donde hay innumerables sitios donde poder cenar y tomar una copa. Un sitio curioso es una cafetería en la que hay un antiguo avión militar de carga en el que te puedes tomar una copa en si interior, curioso y original.

No hay comentarios: